La Política Colombiana: Mujeres U Hombres
Las capacidades intelectuales de la mujer cada vez son más minusvaloradas para ocupar cargos laborales generando un problema de desigualdad de género siendo que a su vez es un problema que surgió hace varios años y actualmente sigue incrementando y atormentando a la sociedad. Con el paso del tiempo se ha creído que mientras se está formalmente comprometido la mujer es quien debe dedicarse a sus hijos si es que los tiene, labores de hogar y hacerse cargo de su pareja, mientras el hombre es quien labora libremente para buscar y conseguir sostener a su familia en cuanto a: alimentación, salud, y bienestar (servicios de la casa, gustos, deseos etc.) es decir contribuir con la ayuda económica. Pero este no es el único problema pues no toda mujer tiene la posibilidad de que su esposo o pareja se haga responsable y son ellas quienes quedan a cargo de sus hogares y no tienen suficientes oportunidades para ello.
De igual forma en cualquiera de las situaciones y principalmente en ámbitos laborales, la mujer será minusvalorada y tendrá menos oportunidades para ser contratada y más si hablamos frente al tema de las entidades públicas debido a su intelecto; pues se le ha hecho creer a la sociedad que tienen menos posibilidades de cumplir con ciertos requisitos que se solicitan para ocupar el cargo. A pesar de que la mujer se presenta a un trabajo en específico (sin importar si lo desea o solo necesita) le será evaluado su perfil y en ese instante es donde los estereotipos influyen en la mayoría de ocasiones para revisar ese aspecto, entonces más allá de negarle una posibilidad de trabajo está la base de la sociedad “patriarcado” que a su vez genera un problema mayor y este se conoce como “la exclusión”.
Según un artículo del tiempo publicado en junio del 2015 se establece que la mujer ha logrado alcanzar importantes niveles de liderazgo que han sido útiles para su preparación y experiencia que se puede ver reflejada en la política y muchos ámbitos más. Aproximadamente el 30% de los cargos provistos en el máximo nivel decisorio debe ser ocupado por mujeres tal cual se establece en la ley de cuotas. Por el contrario la existencia de la ley implicaría que exista mayor oportunidad para ejercer la política femenina así permitiendo que cualquier mujer acceda a la oportunidad de pertenecer a este 30% sin tener en cuenta su experiencia y conocimiento.
Expertos en el tema han buscado la forma de lograr la igualdad en el ámbito político entre hombres y mujeres y para ello la consejería ha optado por apartarse de la cultura y enfocar a las empresas para que abran este espacio, especialmente las que se basan en los recursos humanos o son su prioridad, para lograr cumplir el objetivo a corto y largo plazo. Sin embargo se ha hecho evidente que el reconocimiento y el respeto por la diferencia se ha convertido en problemas fundamentales para las sociedades democráticas pues ningún ser humano está dispuesto a renunciar su dignidad sometiéndose a una exclusión que con el paso del tiempo conlleva a las comunidades vulnerables pasar por un proceso o problema de inestabilidad reflejada en la democracia que se asocia a la impregnación de la estructura del Estado de Derecho con prácticas de exclusión reflejadas a nivel cultural, pues impiden a los ciudadanos constituidos ideológica y culturalmente diferente sientan vulnerados sus Derechos (Libre expresión y pensamiento).
La mujer pasa por diferentes etapas durante su vida, luego de su crecimiento y formación académica debe reflejarla en el campo laboral pero en la gran mayoría la responsabilidad no es solamente ir a trabajar y cumplir con el horario establecido, va más allá de eso pues en algunas ocasiones son madres ya sea de 1 o más niños que necesitan atención, tiempo, ocupaciones de su hogar, familia e incluso de ellas mismas y por todos estos aspectos y más, se cree que no cuentan son capacidades suficientes para rendir laboralmente lo que lleva a que surja una conducta machista.
En conclusión, con el proceso de búsqueda de fuentes confiables e información se pudo evidenciar que la mujer pasa por una etapa de discriminación por partes de los miembros que están a cargo de las entidades públicas justo en el momento en el que ella se interesa y busca formarse e integrarse a la política. Es claro y evidente que los estereotipos en la sociedades modernas influyen en la mayoría de los cargos laborales para ser tomada la decisión de si es aceptada o no. Aunque en la política no es el termino estereotipo en su mayoría, pues también lo son su capacidades intelectuales a la hora de asumir el rol que cumpliría dentro de todas las funciones disponibles y la forma de asumirlo pues se destacan aspectos básicos como lo son: temáticas, lenguaje, expresión, valores, educación que parecen sencillas pero resultan más complejas de lo que se cree por el simple hecho de que no cualquier persona conoce principalmente por la falta de experiencia y la mayoría de las veces es tomado como una excusa.
Finalmente la Ley de cuotas es un tema que actualmente la sociedad desconoce pues en Colombia de aproximadamente 20 Entidades Públicas principales ni siquiera la mitad es ocupada por mujeres e incluso a algunas de ellas se les han violado algunos de sus Derechos fundamentales sin que ellas sean conscientes por falta de información.
En la actualidad, las capacidades intelectuales de la mujer son temas importantes ya que siendo una sociedad que busca la igualdad, llevar de la misma mano aspectos como género (femenino), empleo, labor y el ámbito personal ha conllevado a la aparición o aumento de problemas como Desigualdad, Discriminación y Exclusión. Esto significa que la tesis no ha cambiado pues se evidencia que el género femenino continua pasando por un sistema donde la representación pública debe ser asumida por los hombres y mientras el problema no genere un gran impacto en la sociedad; seguirá continuando.
